martes, 26 de julio de 2011

Exilio






Camine sobre las huellas de mi infancia,
camine sobre las huellas de mi juventud,
adolorida,
desafiante,
agresiva…

No pude ver el dilatado horizonte,
ni el mar,
ni las anemonas azules flotando en la costa,
solo vi la tremenda realidad que me dejo desértica
temblando sobre el oscuro fracaso de mi sentir cósmico.

Bien y mal difuminados hasta hacerse uno,
Dios vino sobre mis manos a atajarme simplemente;
Un pájaro rodo en vez de volar,
mi canto, más que nunca,
alzado como un grito sordo
(ya no sabe cantar, ya no sabe cantar),
sobre los golpes
las sombras danzando con la luz
contaminando mis pulmones.

Este camino es difícil
no hay héroes,
no hay pan,
no hay colores,
solo un camino inhóspito
sin hierbas,
sin brisa,
sin paisaje,
solo un camino,
solo un camino,
simple,
solo,
silencioso.


Neiffe Peña

No hay comentarios: